La boda que os traemos hoy, es una boda muy especial.

No sólo porque fué una boda muy íntima y muy personalizada, 

ya que el total de invitados fueron 30, si no porque es ese tipo de bodas 

con la que muchos soñamos y no nos atrevemos a llevar a cabo.

Como color predominante: el rosa es sus diferentes intensidades tanto en mantelerías, cortinajes y demás, como en flores y accesorios de la Sweet Table y de los exteriores.

Pareja de guapos que ambientaron su boda en los años 60 más dulces y románticos, con la innegable influencia de Ben, el novio, de origen británico.

La ceremonia y la celebración, tuvo lugar el pasado mes de mayo

 en una preciosa casa en el campo propiedad de un familiar de los novios.

 Nos dejaron manga ancha para decorar y personalizar todo el espacio, así que, este fué el resultado!

Fotografía: Adrián A.